26 nov 2012

La Carpintería





Fue una reunión de herramientas para arreglar sus diferencias. El martillo ejerció la presidencia, pero la asamblea le notificó que tenía que renunciar. ¿La causa? ¡Hacía demasiado ruido! Y, además, se pasaba todo el tiempo golpeando. 

El martillo aceptó su culpa, pero pidió que también fuera expulsado el tornillo; dijo que había que darle muchas vueltas para que sirviera de algo.

Ante el ataque, el tornillo aceptó también su culpa, pero a su vez pidió la expulsión de la lija. Hizo ver que era muy áspera en su trato y siempre tenía fricciones con los demás.
Y la lija estuvo de acuerdo, a condición de que fuera expulsado el metro que siempre se la pasaba midiendo a los demás según su medida, como si fuera el único perfecto.

En eso entró el carpintero, se puso el delantal e inició su trabajo. Utilizó el martillo, la lija, el metro y el tornillo. Finalmente, la tosca madera inicial se convirtió en un fino mueble.

Cuando la carpintería quedó nuevamente sola, la asamblea reanudó la deliberación. Fue entonces cuando tomó la palabra el serrucho, y dijo: "Señores, ha quedado demostrado que tenemos defectos, pero el carpintero trabaja con nuestras cualidades. Eso es lo que nos hace valiosos. Así que no pensemos ya en nuestros puntos malos y concentrémonos en la utilidad de nuestros puntos buenos.

La asamblea encontró entonces que el martillo era fuerte, el tornillo unía y daba fuerza, la lija era especial para afinar y limar asperezas y observaron que el metro era preciso y exacto. 

Se sintieron entonces un equipo capaz de producir y hacer cosas de calidad. Se sintieron orgullosos de sus fortalezas y de trabajar juntos en equipo.”

En  la iglesia hemos sido llamados a trabajar como parte del cuerpo de Cristo, podemos ser un brazo, otros pies, otros cabeza, otros oídos, Dios nos ha diseñado tan diferentes, pues la verdad sino fuese así, ¿Qué gracia tendría?

Por eso les pido tal vez tengamos un montón de defectos, pero la verdad Dios nos hizo así a propósito, fuimos diseñados, para una misión, la verdad mejor apoyémonos en lo bueno, y no nos destruyamos en lo malo.

Lo más importante de todo es que sigan demostrando profundo amor unos a otros, porque el amor cubre gran cantidad de pecados. (1 Pedro 4:8)

¡TODOS SOMOS IMPORTANTES PARA LA OBRA DE DIOS!




*      Dr. Raúl Gonzales

22 nov 2012

¡Sin dolor, no hay ganador!








Porque él es quien hace la llaga, y él la vendará; Él hiere, y sus manos curan”. (Job 5:18)

Este pasaje no fue inventado, ni mucho menos la historia de Job, podemos ver grandes hombres de la Biblia que pasaron por dudas, y duras pruebas, pero el mayor ejemplo a todo fue Jesús. 

Lily Goodman, canta esta canción del cual viene el titulo de este devocional “Sin dolor”. Y en la letra si la conoces, comienza  diciendo: 
 A veces hay que ser golpeado para poder crecer,
Y alcanzar un poco más de madurez,
Porque no habría forma de saber manejar lo que vendrá ,
Y aunque el dolor en esos tiempos puede ser Tan cruel,
pero Dios no nos dejará permanecer,
Allá más tiempo del que podamos soportar.

No quieres pasar dificultad ,
Pero a veces servirá,
Para despertar el don que dentro hay,
 Y salir de la comodidad,
Que te aferra a ese lugar,
Y a la meta con firmeza avanzar”

Debemos recordar que ante todo el dolor, esta Dios con nosotros, muchas veces nos preguntamos, "¿Por qué Dios me permites tanto dolor?" "¿Por qué tengo que sufrir tanto, me duele?" "¿Por qué debo pasar por el dolor y le sufrimiento?. Estas son preguntas que nos hacemos en momentos muy difíciles de nuestra vida, yo se las hice a Dios, y hace unos días el respondió y me dijo claramente: "Yo quitare el dolor de tu corazón, cuando hayas entendido que debes buscarme solo a mí para ser feliz."

Las personas nos van a fallar, nuestros amigos, hermanos en Cristo, incluso nuestra propia familia, pero Dios quiere que nos aferremos a él, que toda carga, que todo peso, que todo aquello que nos hace llorar, se lo entreguemos a Él, porque para Él no hay nada imposible (Lucas 1:37) .

El hace la llaga, pero solamente Él la vendará, quizá no llegamos a entender el dolor, el sufrimiento, hasta no ver la Gloria de Dios, pero debemos entender que esos procesos con parte de nuestra vida de seguir a Dios aun cuando no lo vemos.

Muchos de las personas se quedan a mitad, sin avanzar, porque han dudado de lo que Dios puede hacer, sí tu estas esperando en Dios, si estas esperando una respuesta, aférrate a Él.

El Apóstol Pedro nos dice: “Por eso, aun cuando por algún tiempo tengan que pasar por muchos problemas y dificultades, ¡alégrense! La confianza que ustedes tienen en Dios es como el oro: así como la calidad del oro se pone a prueba con el fuego, la confianza que ustedes tienen en Dios se pone a prueba con los problemas. Si ustedes pasan la prueba, su confianza será más valiosa que el oro, pues el oro se puede destruir. Así, cuando Jesucristo aparezca, hablará bien de la confianza que ustedes tienen en Dios, porque una confianza que ha pasado por tantas pruebas merece ser alabada. (1 Pedro 1:6-7)

Sé que duele el tiempo donde se pasa por la prueba, el problema, cuando sientes que ya no puedes más, que el dolor te invade, y las lagrimas te envuelven, yo hasta hoy te puedo decir que estoy esperando una respuesta de Dios y aun en medio del llanto, sé que el cambiara mi lamento, sé que cuando salga de todo, por haberme aferrado a Él, yo diré ¡Gloria a mi Dios!

Deja ya tu pasado atrás, deja todo lo que te pueda también provocar más daños, y si eso no se va de tu vida, pon en claro que ya no vas a permitir tu tampoco que el dolor te invada,  y te atrape, también debemos poner de nuestra parte.

Confía en Dios, Él te esta moldeando, a su manera, a tu manera será más doloroso, porque vas a fracasar, te vas caer, y te lastimaras aun el doble, Dios quiere tu vida en sus manos, porque Él sacara lo mejor de todo aquello que hoy estés atravesando. 



Dr. Raúl Gonzales